El film “Alicia y John, el peronismo olvidado” dirigida por el platense Carlos Castro, cuenta la vida del revolucionario que, junto a su esposa, luchó por la vuelta de Perón y soñó con la revolución socialista. El rescate de su historia a mas de 40 años de su muerte.
Por Ulises Rodríguez
El Bebe en La Plata. El Gordo en la militancia. Así le decían a John William Cooke, el intelectual más revolucionario que dio el peronismo en la resistencia. Su vida tuvo tantos vaivenes como el movimiento al que defendió con su pluma y con las armas.Su historia es digna de una película y hasta allí llegó el director platense Carlos Castro con un documental-ficción que ya termina la posproducción para su estreno.El film no excluye el papel destacado que cumplió su mujer, Alicia Eguren -activa militante desaparecida en 1977-; por eso se titula Alicia y John, el peronismo olvidado. 
El relato está basado fundamentalmente en la correspondencia que Cooke mantenía con Juan Perón mientras estaba en el exilio. El documental gira en torno a la relación entre el revolucionario platense y su mujer con el líder justicialista.“Contamos como Cooke y Eguren van evolucionando y teniendo giros ideológicos sin sacar los pies del plato del movimiento peronista. Lo más fuerte es como esa pareja intenta durante muchos años generar un peronismo que no pudo ser. Es por eso que me interesó esta pareja militante que dejó todo por la militancia”, cuenta Castro.El hereje Protagonizada por Ana Celentano (Alicia Eguren) y Carlos Portaluppi (Cooke) el trabajo incluye entrevistas a personalidades destacadas e historiadores del peronismo, material de archivo y recreaciones a cargo de estos dos actores. De Cooke no existen casi filmaciones y, menos aún, de Alicia Eguren. Solamente escritos, fotografías y recortes de diarios. ¿Será por eso que se lo considera un olvidado dentro del peronismo?
Para el director Cooke fue una figura límite dentro del peronismo ortodoxo: “Por eso hay reparos en considerarlo un hombre del movimiento aunque si se bucea un poco en la izquierda tampoco se lo reivindica porque lo consideran peronista, y gran parte de la izquierda argentina fue -y lo es hoy ferozmente-muy antiperonista.
Se convirtió en un hereje, lo cual es terrible ya que si hubo quienes lucharon por la vuelta de Perón fueron el Gordo Cooke y Eguren”.El estreno oficial del documental está previsto para mitad de este año. A esta altura pasó por el Festival Latinoamericano de Rosario y por el XXIII Festival Internacional de Cine de Mar del Plata.
El relato está basado fundamentalmente en la correspondencia que Cooke mantenía con Juan Perón mientras estaba en el exilio. El documental gira en torno a la relación entre el revolucionario platense y su mujer con el líder justicialista.“Contamos como Cooke y Eguren van evolucionando y teniendo giros ideológicos sin sacar los pies del plato del movimiento peronista. Lo más fuerte es como esa pareja intenta durante muchos años generar un peronismo que no pudo ser. Es por eso que me interesó esta pareja militante que dejó todo por la militancia”, cuenta Castro.El hereje Protagonizada por Ana Celentano (Alicia Eguren) y Carlos Portaluppi (Cooke) el trabajo incluye entrevistas a personalidades destacadas e historiadores del peronismo, material de archivo y recreaciones a cargo de estos dos actores. De Cooke no existen casi filmaciones y, menos aún, de Alicia Eguren. Solamente escritos, fotografías y recortes de diarios. ¿Será por eso que se lo considera un olvidado dentro del peronismo?
Para el director Cooke fue una figura límite dentro del peronismo ortodoxo: “Por eso hay reparos en considerarlo un hombre del movimiento aunque si se bucea un poco en la izquierda tampoco se lo reivindica porque lo consideran peronista, y gran parte de la izquierda argentina fue -y lo es hoy ferozmente-muy antiperonista.
Se convirtió en un hereje, lo cual es terrible ya que si hubo quienes lucharon por la vuelta de Perón fueron el Gordo Cooke y Eguren”.El estreno oficial del documental está previsto para mitad de este año. A esta altura pasó por el Festival Latinoamericano de Rosario y por el XXIII Festival Internacional de Cine de Mar del Plata.
